El grosor de la goma externa es más que suficiente para proteger los hilos de cable. La relación de flexibilidad gomosa de esta, con su resistencia, es muy buena. Además, el hilo interior de cable lleva dos capas de goma, lo que además de proteger el cable, mejore el aislamiento entre los dos hilos polares, de tal forma que a la hora de practicar las soldaduras en las clavijas, pelando justo el extremo de cable necesario para que quede fijado a las mismas, el aislamiento entre ambos está garantizado de una forma impecable.
Al hacer soldaduras he comprobado que las gomas -aunque no hay que abusar de ello-, tienen buena resistencia al calentamiento, cuando te pasas algo de tiempo al colocar el estaño, ya que ese calor se transmite por toda la pieza metálica de la clavija, pero la goma no se ha derretido ni quemado en ningún caso. Ya he utilizado este cable en otras ocasiones, y la resistencia de las gomas me hace pensar que han mejorado su fabricación, aunque es una deducción mía, no tengo realmente constancia de ello.