17. Humedad de aire y almacenamiento
La madera reacciona de manera sensible a los cambios climáticos y, debido a que las guitarras generalmente están fabricadas en gran parte de este material natural, el almacenamiento es un aspecto extremadamente importante a considerar.
Si se desea mantener el sonido, la funcionalidad, por no decir la diversión con el instrumento, durante largo tiempo, se debe centrar la atención en la humedad.
Aunque la madera tonal se almacena y se seca cuidadosamente antes de procesarla, conserva sus propiedades higroscópicas, es decir, su tendencia a absorber y liberar humedad del ambiente. Y eso significa que con las fluctuaciones climáticas, su volumen y por lo tanto sus propiedades físicas también varían.
No en vano se dice que: “La madera trabaja”.
Por ejemplo, si la humedad cae por debajo del 40% durante períodos cálidos, la madera de nuestra guitarra libera humedad al ambiente. Cuanto más seco esté el aire y más tiempo se exponga un instrumento a él, mayor será el riesgo de daños graves. En el peor de los casos, la madera pierde tanto volumen que se encoge considerablemente. Todos los constructores de guitarras conocen las grietas en el cuerpo o los trastes que sobresalen.
Por supuesto, esto también se también se aplica si hay demasiada humedad, lo que hace que la madera se hinche, algo que podría ser el caso cuando se viaja a áreas tropicales o si se almacena el instrumento en habitaciones húmedas.
Pero incluso si no se producen grandes catástrofes, la guitarra envía pequeñas aunque claras señales de advertencia si se almacena incorrectamente.
Estas incluyen
- cambios de sonido sutiles
- problemas de escala
- inicio repentino de ruidos de trasteo
- mpurezas de octavación
- problemas de afinación.
Las guitarras frecuentemente se fabrican con una variedad de maderas diferentes, que van desde la pícea nativa hasta especies exóticas procedentes de climas tropicales. Mientras que la madera de pícea es relativamente blanda y sensible, la caoba, por ejemplo, se muestra dura, densa y robusta.
En el medio hay toda una serie de otros tipos de madera que, con sus diferentes propiedades, también reaccionan de forma más o menos sensible a los cambios climáticos.
La buena noticia:
Siempre que la humedad relativa en las inmediaciones del instrumento se encuentre entre el 45 % y el 60 %, la madera utilizada se mantiene segura.
Higrómetros
Cuando se trata de controlar la humedad, no se puede prescindir de un higrómetro, que mide la densidad de agua del aire. Los higrómetros van desde simples instrumentos de indicación hasta dispositivos digitales que muestran la humedad y la temperatura, siendo capaces de almacenarlos. Esto también incluye versiones para el estuche de guitarra, que envían datos actuales al teléfono móvil a través de mensajes push en cualquier momento.
Humidificadores
Aseguran que el aire de la habitación siempre tenga el nivel óptimo de humedad, lo que no solo beneficia a los instrumentos, sino también a las personas que se encuentran en la habitación. Los humidificadores se dividen en evaporadores, vaporizadores y nebulizadores.
Evaporadores
Llevan el agua a ebullición y dispersan el vapor en el aire de la habitación. Aunque son muy eficientes e higiénicos porque se matan los gérmenes en el agua, consumen una cantidad relativamente grande de energía y si se instalan incorrectamente y en un ambiente más fresco, se puede formar condensación y depositarse en las superficies.
Vaporizadores
Reparten el agua sobre una superficie lo más amplia posible como una especie de estera de filtro y proyectan una corriente de aire sobre ellas. No ofrecen el rendimiento de humidificación de un evaporador, pero consumen menos energía, reducen la temperatura ambiente y regulan la humedad ambiental de forma natural. Requiere la adición regular de desinfectante o depuración mediante luz ultravioleta.
Atomizadores
Usan bombas de ultrasonido o de presión y toberas finas para nebulizar el agua en minúsculas gotitas. Esta niebla fría también se puede diseminar en la habitación por medio de un ventilador. Resultan económicos, consumen relativamente poca energía y ofrecen un rendimiento de humidificación de bajo a medio. También reducen la temperatura del aire, pero existe el riesgo de condensación y de que se produzcan depósitos de cal alrededor del dispositivo, por lo que requieren una limpieza regular y cuidadosa para evitar la contaminación.
Humidificadores especiales para guitarras
Los humidificadores de aire portátiles, especialmente diseñados para instrumentos acústicos, son dispositivos relativamente económicos. Con el PW-HPK-01, Planet Waves ofrece un sistema de dos piezas que no solo humidifica sino que también deshumidifica si es necesario, y es capaz de mantener la humedad en el estuche estable al 45 %. Una parte se cuelga en la boca de la guitarra y la otra se instala en el área de la pala del instrumento. Los mensajes actualizados de temperatura, humedad y advertencias se envían al teléfono móvil a través de Bluetooth. Para su uso se requieren los llamados paquetes humidificadores, capaces de realizar su trabajo entre 2-4 meses después de abrirlos. Si se desea mantener el sistema en funcionamiento, se deben seguir comprando más para reponerlos, pero es sin duda una inversión llena de sentido para un instrumento costoso.
Otros humidificadores portátiles simplemente se cuelgan en la boca de la guitarra. Allí, la humedad se libera a través de una esponja que debe humedecerse a intervalos regulares. Dado que estos dispositivos solo agregan humedad pero no la eliminan, siempre debe vigilar de cerca el clima en la caja.
