10. Conclusión

Lo decisivo en la compra de una caja está en una cuestión: ¿Cuán en serio me voy a tomar el tocar el instrumento? Básicamente se puede adquirir el primer tambor que se encuentre, utilizar un soporte barato e intentar sufrirlo lo menos posible. Pero cuando se pretende tomarse en serio el aprendizaje, la experiencia a mostrado que merece la pena prestar atención a la buena calidad. Quizás se puede comparar con un coche: Cualquier importación coreana (2 puertas, 50 CV) también funciona, pero con un Porsche se conduce mejor. Solo que a un conductor novel no se le recomienda directamente un Porsche, sino que entre medias existe una gran posibilidad de elección. Afortunadamente tocar con un Porsche (precios desde unos 500 euros para arriba) no conducirá al siniestro total, pero un buen instrumento de la clase media (precios desde aprox. 200 euros) es una buena inversión.

Después podríamos contemplar el timbre. El golpe de caja siempre sobresale del sonido global de una banda, y tiene algo del efecto de una señal. Tú debes considerar qué sonido básico va mejor con la música que deseas tocar, y después desde luego probar algunos modelos. Elegir entre una caja de metal o de madera es una cuestión del gusto personal considerando el sonido básico. Quizás no sea malo para futuras evoluciones el empezar adquiriendo una caja universal. A menudo pasa que uno acaba vendiendo su batería para comprar una mejor. Por otra parte una caja de alta gama te puede acompañar toda la vida, y no tienes pérdidas con la venta y la nueva compra. En la compra de cascos de alto valor en cualquier caso no se incluyen las cajas.

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