Soy bajista y llevo un tiempo utilizándolo en directo junto a unos auriculares inear Shure 215, con muy buen resultado. Ofrecen una calidad de sonido y volumen más que suficientes en escenarios de tamaño medio y en salas. Las posibilidades de configuración (mono/estéreo, doble entrada XLR, entrada auxiliar mini jack, etc) cubren todas las necesidades habituales de cualquier músico. La calidad de construcción es sólida y resistente.
Tienen un tamaño discreto (algo mayor que la mayoría de inalámbricos), es cómodo y se sujeta con seguridad, aunque al tratarse de un equipo no inalámbrico, obliga a llevar un segundo cable colgando. No es un gran inconveniente y apenas notas que estás sujeto a un cable, pero hay que tenerlo en cuenta si eres un músico que deba moverse mucho por el escenario. A favor, los técnicos de sonido suelen estar encantados ya que es sistema es fiable 100%, sin interferencias ni configuraciones: te conectan un cable y listo. Si el cable funciona, todo funciona.
Muy recomendable para iniciarse en el mundo de los inears sin hacer un gran desembolso. Merece la pena.