Prim Violin Strings Medium

j'utilise ces cordes depuis plusieurs années, sur les conseil d'un violoniste professionnel en musique trad. J'aime leur son moelleux et elles sont très durables, la qualité ne décline pas grâce à l'âme en métal ( c'est mon luthier qui m'a expliqué ça ). Je les change une fois par an sachant que j'ai tendance à jouer plusieurs heures par jour. Je joue des musiques trad klezmer et orientales.

I tried Prim strings because folk fiddler Garry Blakely uses them and his sound is magical. I found them a little difficult to get used to at first because the sound is so clean and distinct that every intonation error is immediately exposed. In contrast to, say, Zyex, or Helicore, there is no warm envelope round the sound - you have to create the warmth with the quality of your playing. On a good day I think I'm in heaven with these strings, but on a bad day, the opposite is true, so I find them challenging. Reliability is excellent - they stay in tune easily. Durability also excellent - they last and last with consistently good sound.

Llevo años usando las Prim porque son las mejores cuerdas metálicas para mis tres violines. Ofrecen un sonido brillante y equilibrado en toda la tesitura, pero con un toque de calidez sorprendente. Son de respuesta inmediata, y muy estables en cuanto afinación, perfectas para música tradicional como el country y la irlandesa/escocesa, incluso para flamenco.

Aún siendo de tensión media, se sienten con una tensión superior comparadas con otras cuerdas de tensión media.
Por su fabricación, el entorchado es algo rudo, por lo que tienen un tacto un tanto áspero (entorchado de acero cromado sobre base maciza de acero). Por ambas cosas, resultan más complicados los cambios de dinámica y pierden un toque de sensibilidad, por lo que no puedo recomendarlas para estilos como el clásico (Prim se especializa en instrumentos tradicionales como es la nyckelharpa).

Por lo demás, son tremendamente duraderas (he llegado a usar un mismo juego durante ¡un año! sin perder calidad sonora), muy resistentes a la corrosión, fáciles de limpiar y sencillas de ajustar al instrumento (aunque esté acostumbrado a tripa o sintéticas). Un producto perfecto para "fiddlers" y otros estilos como el folklore español, el klezmer, la música balcánica o el flamenco.