Elegí este clavijero porque las medidas expuestas en el anuncio coincidían bastante con las del clavijero original estropeado de una mandolina de la marca Cameo, modelo HMD6, que se compró en 1977 o 1978. Desconozco el lugar de fabricación. Cuando vi el anuncio de este clavijero de Harley Benton pensé que, por el precio, valía la pena correr el riesgo de que no sirviera para mi vieja mandolina.
Pero, afortunadamente, coincide en todos los puntos de los ejes e, incluso, en los tornillos de sujeción. Hay una pequeña diferencia de tres milímetros más en el largo de los ejes del clavijero Harley Benton. Pero, esa diferencia parece que no afecta al sonido y funcionamiento del instrumento en absoluto.
Los aros embellecedores que rodean los ejes no coinciden con los originales que son más anchos. Esto lo he resuelto con tiritas de papel de aluminio, para aumentar el grosor de los nuevos aros y que encajen a presión en los agujeros.
El único inconveniente que finalmente le encuentro es que el giro de las palas no es muy suave. Supongo que hay formas de mejorar esto que ya investigaremos.
Por tanto, muy satisfecho con el resultado y agradecido a Harley Benton por un producto que se adapta casi perfectamente a mi mandolina de 43 años y a un precio muy asequible.