V
Buena relación calidad-precio
Después de 4 meses y medio con este bajo, aquí va mi review:
Llevaba 1 año tocando el bajo cuando decidí comprarme este Gretsch. Tenía claro que quería uno de escala corta, así que después de investigar por internet y ver vídeos, decidí comprarlo.
Acabados:
A penas lo saqué de la caja, me enamoré. El color rojo oscuro que deja entrever las vetas de la madera es espectacular. En general, los acabados estéticos son muy buenos, y quedé sorprendido con lo bien que se sienten los bordes del mástil, perfectamente lisos y con un lacado muy cómodo.
Sin embargo, la parte trasera del mástil (que está lacado) vino con una especie de pequeño arañazo. No incomoda a la hora de tocar, pero si se nota al poner la mano encima. Sin embargo, no es nada preocupante.
Los afinadores cumplen su función, y mantienen la afinación durante mucho tiempo, pero llegaron un poco sueltos y con "puntos muertos" que al girar no cambian la afinación. Conseguí solucionarlo apretando los tornillos que traen.
El selector de pastillas llegó un poco suelto, pero girándolo un poco con la mano quedó perfecto.
Sonido:
Al enchufarlo, lo primero que noté es que el volumen de sonido que sacaba era menor que el de mi anterior bajo, un Harley Benton PB-50, nada que no se pueda solucionar subiendo el volumen del amplificador.
Las dos pastillas cumplen su función, y las tres posiciones proporcionan una gran versatilidad. Estoy especialmente encantado con la pastilla del puente, que nada tiene que envidiar al sonido que sacan las pastillas jazz tradicionales.
Y aquí llega el único punto con el que no estoy del todo contento con este bajo: al mes y medio de tenerlo, el selector empezó a fallar. Cuando pasaba de la pastilla del puente a la del brazo, y viceversa, no producía ningún sonido, y tenía que mover el selector varias veces para poder solucionarlo. Con el paso del tiempo el problema ha ido mejorando, y sólo ocurre de forma esporádica.
Tocabilidad:
La escala corta, unida a la corta anchura de la cejilla, hacen que este bajo sea muy divertido, cómodo, y fácil de tocar.
Tiene una distribución de peso muy equilibrada, sin cabeceo alguno, y es bastante ligero.
Llevaba 1 año tocando el bajo cuando decidí comprarme este Gretsch. Tenía claro que quería uno de escala corta, así que después de investigar por internet y ver vídeos, decidí comprarlo.
Acabados:
A penas lo saqué de la caja, me enamoré. El color rojo oscuro que deja entrever las vetas de la madera es espectacular. En general, los acabados estéticos son muy buenos, y quedé sorprendido con lo bien que se sienten los bordes del mástil, perfectamente lisos y con un lacado muy cómodo.
Sin embargo, la parte trasera del mástil (que está lacado) vino con una especie de pequeño arañazo. No incomoda a la hora de tocar, pero si se nota al poner la mano encima. Sin embargo, no es nada preocupante.
Los afinadores cumplen su función, y mantienen la afinación durante mucho tiempo, pero llegaron un poco sueltos y con "puntos muertos" que al girar no cambian la afinación. Conseguí solucionarlo apretando los tornillos que traen.
El selector de pastillas llegó un poco suelto, pero girándolo un poco con la mano quedó perfecto.
Sonido:
Al enchufarlo, lo primero que noté es que el volumen de sonido que sacaba era menor que el de mi anterior bajo, un Harley Benton PB-50, nada que no se pueda solucionar subiendo el volumen del amplificador.
Las dos pastillas cumplen su función, y las tres posiciones proporcionan una gran versatilidad. Estoy especialmente encantado con la pastilla del puente, que nada tiene que envidiar al sonido que sacan las pastillas jazz tradicionales.
Y aquí llega el único punto con el que no estoy del todo contento con este bajo: al mes y medio de tenerlo, el selector empezó a fallar. Cuando pasaba de la pastilla del puente a la del brazo, y viceversa, no producía ningún sonido, y tenía que mover el selector varias veces para poder solucionarlo. Con el paso del tiempo el problema ha ido mejorando, y sólo ocurre de forma esporádica.
Tocabilidad:
La escala corta, unida a la corta anchura de la cejilla, hacen que este bajo sea muy divertido, cómodo, y fácil de tocar.
Tiene una distribución de peso muy equilibrada, sin cabeceo alguno, y es bastante ligero.
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