Introducción

Si se pretende difundir música, primero debe ser grabada. A partir de aquí procede realizar un tratamiento de edición al material registrado, donde se aplican eventuales modificaciones o rectificaciones, y finalmente realizar los ajustes de niveles en el Mixing, trabajando el material pista a pista o por grupos de instrumentos con un ecualizador, efectos de dinámica como el compresor, y aplicando otros efectos como Delay o Reverb.

El resultado de estas mezclas es por norma general un fichero estéreo. Este fichero se puede convertir en formato MP3, o grabar en un CD o dejar editar en un plato de vinilo, pero antes de esto existe un todavía un paso necesario que dar – el Mastering. Si lo pensamos detenidamente, esto que hoy entendemos por Mastering realmente debería llamarse „Premastering“, porque originalmente se tomaba el proceso de „Mastering“ como un paso importante dentro de la fase del prensado de vinilos – nosotros, no obstante, vamos quedarnos con el sencillo concepto de „Mastering“ como el tratamiento extensivo de los ficheros de mezcla (estéreo).

¿Os preguntaréis quizás, qué más se puede hacer realmente con el fichero de una mezcla estéreo terminada? Pues, lo cierto es que queda bastante...

Sus personas de contacto