2. ¿Qué son las sordinas?

Las sordinas son unos accesorios de metal, plástico, goma o madera que, o bien se acoplan a la campana (pabellón, difusor) de un instrumento de viento metal, o bien se colocan delante con la mano izquierda. Con ello se varía el volumen, o el espectro de armónicos del instrumentos. Las sordinas son empleadas sobre todo para la trompeta o el trombón, y excepcionalmente en los cornos o las tubas.

La primera sordina de madera para trompeta (¡del año 1636!), compuesta por una pieza de madera que se acoplaba en la campana de la trompeta, servía ya entonces para modificar la coloración sonora del instrumento, y para reducir el volumen del mismo. En esta doble función hoy en día no ha cambiado nada.

Vamos a echar un vistazo un poco más de cerca con estas consideraciones básicas:

Dos pájaros de un tiro

1. El sonido es (según la construcción de la sordina), bastante más amortiguado, lo que propicia que el músico pueda practicar sin causar molestias en su entorno. Con una sordina se puede tocar incluso a media noche en un piso compartido sin generar problemas por el volumen del instrumento. Además, antes de un concierto, o antes de una intervención de estudio, usando una sordina se puede calentar sin molestar a los otros músicos, o a los demás huéspedes del hotel. No obstante, se debe tener en cuenta que se ponen en compromiso el sonido y la respuesta del instrumento. Los sistemas de sordina electrónicos especiales, (por ejemplo el Yamaha Silent Brass ), intentan compensar esta merma y aportar naturalidad al sonido del instrumento por medio del uso de un fonocaptor y auriculares.
2. En las busca de nuevas posibilidades de expresión, se ha experimentado recurriendo para las sordinas a diferentes materiales y formas. Con una sordina acorde, por ejemplo, se puede hacer “reír” a una trompeta, o hasta hacer relinchar a un trombón. Sobre todo a finales del siglo 19 y principios del 20, se desarrollaron un montón de exóticos modelos de sordinas, donde se dio empleo a materiales como la fibra o laminados y hasta bisagras. La creatividad en este sentido no tenía, ni tiene tampoco límites.

A lo largo del tiempo se cristalizó una completa línea de sordinas, con ejemplares dedicados a efectos y estilos especiales. Existen estilos de música basados ampliamente en tipos de sordinas concretos, no podemos dejar de mencionar a Duke Ellington y su Jungle Sound, asociado intrínsecamente a ellas, ni tampoco el sonido de Miles Davis en la fase del Cool Jazz, fuertemente marcado por el empleo de las sordinas Wah-Wah.

La selección de sordinas disponible hoy día es enorme, y cada músico tiene sus propias preferencias. Pero en la trompeta y en el trombón se debe tener en cuenta que todos los músicos empleen el mismo tipo de sordina, en caso ideal también del mismo fabricante. Solo de esta manera se puede mantener una imagen sonora homogénea.

Con Sordino

Una sordina varía fuertemente el comportamiento de armónicos, y de esta forma en un Ensemble o en una orquesta, el sonido adquiere un carácter reforzado. ¡Y esto a pesar de la merma de volumen! Un efecto que gustan emplear muchos arreglistas para establecer nuevas instrumentaciones (por ejemplo una trompeta amortiguada junto con unos saxofones en arreglos para una Big Band). Si un compositor o arreglista aplica una sordina en pasajes concretos en una pieza clásica, lo indica en las partituras anotando “con sordino”. En arreglos para Big Band, se encuentra frecuentemente el término en inglés “Mute”, a menudo también con tipos de sordina concretos, como por ejemplo Straight Mute, Plunger o Cup Mute. Si tras un pasaje con sordina se vuelve al sonido natural del instrumento, se indica el correspondiente “abierto” en la partitura. Los trompetistas o trombonistas de Big Band, por tanto, deben disponer de una selección de sordinas para adaptarse a diferentes sonidos. Las maletas y bolsas actuales ofrecen a menudo compartimentos especiales para el transporte de estos importantes accesorios. Aunque para el transporte de las, en comparación, enormes sordinas de trombón grave, se precisa una bolsa de transporte extra.