Thomann Bongoset

Utilizo los bongos para anexar calidez rítmica en algunas de mis grabaciones musicales. Tengo otro set de bongos, y como ya no dispongo de espacio para tener un set de congas, decidí afinar un poco más graves los bongos que tenía para utilizarlos casi como tales, y agregar otro set de bongos para afinarlos más agudos, en afinación de bongos.
Para ello he adquirido este set de Thomann, que me ha sorprendido al recibirlo, ya que son muy llamativos, alegres, con buen cromado, y están muy bien construidos en relación al precio.
Tiene el detalle que los diferencia de otros, que llevan una hendidura en los laterales para que al tocar puedan ajustarse a las piernas, eso sí, tener cuidado con la tela del pantalón, que no sea resbaladiza, de lo contrario pueden salir disparados. Normalmente los bongos llevan unos hierros laterales para tensar el parche que luego se te incrustan en las piernas, por lo que éstos resultan más cómodos.
Traen su llave especial de afinación (se afinan desde arriba), y se pueden afinar para conseguir el sonido típico de los bongos.
Se pueden afinar comparando con algún instrumento (piano o guitarra), o con una app de piano virtual para el móvil, o una app de afinación.
Estos bongos según mi gusto los tengo afinados a D4 y A3 (pequeño y grande respectivamente), sin ningún problema, por lo que el el otro set de bongos lo he dejado más grave, a A3 y F3 (tambor macho y hembra respectivamente).
El sonido que dan es muy audible y agradable, quizá un poco metálico, aunque son de madera, pero permiten expresividad al tocar, y en las grabaciones me salen muy bien (suenan realmente como bongos). Agregándole Reverb adquieren una dimensión espacial, o sin Reverb suenan íntimos y cercanos.
Para guardarlos o transportarlos he adquirido la funda Millenium opcional, que también es económica, sobrando espacio en su interior para el bocadillo, bebida y la toalla, si algún día los llevo a la playa, ya que la funda es bastante holgada.
Según tengo entendido, conviene aflojar un poco la tensión de los parches al guardarlos, ya que al ser de piel natural son suceptibles a los cambios del clima, con la humedad se aflojan, y con el clima seco se tensan, por ello al aflojarlos un poco cuando no los usamos, evitamos sorpresas de rajaduras de los parches. Con la llave que trae es fácil darles media vuelta a cada tuerca para aflojar, así al volverlos a usar se recupera la media vuelta, quedando afinados.
Para lubricarlos cada tanto, si la piel se reseca, he utilizado grasa tipo caballo, que se vende en las zapaterías, dando muy buen resultado, además he leído que también puede usarse para este fin, aceite de almendra.
Es un buen producto, compra muy recomendable.