La verdad es que te quedan los auriculares como nuevos, pero la instalación cuesta un poco... bastante. Las almohadillas llevan una goma elástica y medio dura, que hay que estirar a presión alrededor de la carcasa de cada auricular. Mientras estiras el elástico con una mano, con la otra aseguras la parte que está ya colocada para que no se salga. Y lo más complicado es estirar el final. Eché de menos un manual de instalación, o por lo menos algún consejo o truco para realizar la instalación. Pero bueno, el caso es que una vez colocados vuelves a notar que aíslan y suenan como cuando eran nuevos, que supongo que es lo que cuenta.