Un buen cajón flamenco, con buenos graves y un buen balance de matiz, ya que los bordones están bien ajustados de presión, lo que permite realizar pianos. El sistema interior del cajón es mejorable, ya que el agarre de la goma y la alcayata no es del todo fiable. Convendría que trajera funda, aunque supusiera un aumento del precio, ya que este instrumento se suele utilizar mucho en actuaciones al aire libre y apenas nada en el estudio particular (y raramente en auditorios); la humedad de algunas regiones puede deteriorar la madera. La relación calidad-precio es excelente, si bien los cajones artesanales poseen una mejor calidad acústica.