La araña cumple perfectamente con su función: Vale para micrófonos grandes, lo mantiene totalmente anclado en su lugar sin importar el peso (no se desliza para abajo, da igual el tiempo que pase) y no daña el micrófono. Puedes confiarle a este soporte tus micrófonos caros. Además funciona muy bien para suprimir en la grabación las vibraciones o golpes que se le puedan dar accidentalmente al soporte del micrófono.
El filtro antipop es también bastante decente, además trae un recambio por si se te rompe el que viene puesto.
La única contra es, obviamente, el precio: Este soporte no es económico en absoluto, quizás sea demasiado caro, pero lo que está claro es que es de mucha calidad, y si compras un micrófono caro, no vas a ponerle (o no deberías) una araña barata, así que, lo dicho, cumple sobradamente con lo que se espera por este precio.