A falta de probarlo con más combinaciones de amplificadores y pedales, maravilloso, por liviano y dimensiones reducidas, se maneja con muchísima facilidad, no se cansa la mano ni el brazo después de dos horas sujetándolo.
La construcción es super sólida y el acabado magnífico, el aspecto antiguo muy bueno y se ve la calidad de los materiales por todas partes, lo mires por donde lo mires y el utilizar el conector XLR y no un cable integrado es muy buena forma de evitar posibles averías o roturas del cable con una más que posible reparación del micro en lugar de cambiar un cable.
El potenciómetro va super suave y la posición trasera te imposibilita el cambiar su posición accidentalmente.
El sonido, estupendo, sin más.
En definitiva, una maravilla, creo que merece la pena el precio que tiene, totalmente recomendable.