En cuanto colocamos los elementos en la guitarra perdemos automáticamente el miedo a que se nos pueda caer, por lo que me parece un complemento esencial para el guitarrista.
Se coloca muy fácilmente (necesitaremos un destornillador y unos alicates; aunque las instrucciones no están muy claras existen en la red muchos vídeos que nos lo explican paso a paso) y nos da una enorme seguridad. En caso de que queramos cambiar las correas se puede desmontar con facilidad, aunque se recomienda tener al lado alguna herramienta como alicates para hacerlo; mejor tener claro con qué correas vamos a usarlo y, si tenemos otra guitarra, mejor comprar otro juego. En resumidas cuentas, un complemento necesario, que cumple perfectamente con su función y que es sencillo de instalar.