El Behringer Flow 8 es un mezclador digital compacto que, gracias a su reducido tamaño y sus numerosas funciones, resulta idóneo para una amplia variedad de áreas de aplicación. Las configuraciones establecidas se pueden guardar, para ser recuperadas posteriormente en el momento que se requieran nuevamente. A través de una App dedicada es posible controlarlo de forma remota, mientras que al mismo tiempo también puede estar recibiendo audios vía Bluetooth desde una fuente de señal externa derivados a una tira de canal extra. Además posee otras seis tiras de canal, dos de ellas en estéreo, parte de donde también viene el nombre de Flow 8. Cada tira del canal está equipada con un ecualizador y un compresor. Gracias a su tamaño compacto y su manejo simple y flexible, es capaz de sentirse cómoda en diferentes situaciones de aplicación. Ofrece una funcionalidad confiable y sin complicaciones, y demuestra su efectividad tanto en actuaciones en vivo, en salas de ensayo o en sistemas se sonorización para conferencias.
El Flow 8 dispone dos entradas concebidas únicamente para micrófonos. Allí también permite conmutar una alimentación fantasma de 48V. Gracias a los conectores combinados XLR/TRS, se pueden conectar bien otros dos micrófonos dinámicos a través de cable XLR, o bien instrumentos como señales de línea por cable Jack de 6,3mm. El resto de entradas Jack entre los conectores son idóneas para señales de línea estéreo, con lo que se pueden conectar guitarras y teclados, por ejemplo. La salida de monitor estéreo está terminada con tomas Jack de 6,3mm, y posee una toma de auriculares estéreo en el mismo formato de 6,3mm. Además permite conectar un pedal conmutador que se puede usar para controlar diferentes funciones. Con todo ello, también dispone de dos secciones de efectos a bordo, cada una con 16 efectos. Estos se pueden seleccionar a través de la interfaz de usuario, de la pantalla, así como desde la App.
El destino de los pequeños mezcladores generalmente suelen ser lugares donde se dispone de poco espacio. Para asegurarse de ser perfectamente funcional también en este contexto, el Flow 8 ofrece el control intuitivo a través de la App FLOW, disponible tanto para Android como para iOS. Para ponerla en uso lo único que hay que hacer es conectar el emparejamiento en el mezclador y abrir la aplicación en el dispositivo móvil. La conexión USB permite el envío de las ocho pistas directamente a un DAW. Para grabaciones limpias sin Clipping, la salida principal estéreo está equipada con un ecualizador de 9 bandas y un limitador. Por cierto, esto también funciona de forma inalámbrica a través de Bluetooth. El Flow 8 tiene soporte Class-Compliant, de manera que la grabación multipista en combinación con un kit de conexión de cámara y un software DAW también es factible con dispositivos iOS.
Fundada en Alemania por Uli Behringer y ahora con sede en China, la empresa ha sido sinónimo de equipos económicos desde el primer producto, el Studio Exciter F. Mesas de mezclas como la Eurodesk MX8000, así como innumerables procesadores de señal y, más tarde, también equipos de sonorización, han hecho posible que innumerables músicos, incluso con presupuestos limitados, equiparan sus estudios domésticos, salas de ensayo y PA móviles con equipos que de otro modo hubieran sido inasequibles. La gama de productos de Behringer ha crecido constantemente a lo largo de los años. Por medio de la adquisición de otras empresas, entre otras Midas, Klark Teknik y TC Electronic, no solo incorporaron nuevos grupos de productos, sino que también aportaron sus conocimientos técnicos al desarrollo de productos.
Gracias a la función EZ-Gain, los ajustes de ganancia para cada uno de los canales son establecidos automáticamente por el Flow 8 de Behringer tan pronto como se pueden escuchar los sonidos más fuertes. Si no hay señal en las entradas del micrófono 1 y 2, la alimentación fantasma se activa automáticamente. Por este motivo, para operar con un micrófono de condensador simplemente debe ser conectado. El flujo de trabajo resulta enormemente simplificado a la hora de nivelar las señales. Con ello, las señales siempre son registradas sin problemas, limpias, sin distorsiones y con mínimo ruido. A partir de aquí, los músicos pueden concentrarse completamente en su instrumento. La función se puede activar a elección para uno o para todos los canales.