Este controlador es una buena forma de empezar a producir en casa sin arriesgar una gran cantidad de dinero.
Las teclas son cómodas, los pads también y los knobs son de giro infinito y tacto agradable. Aunque es de plástico casi en su totalidad, parece bastante resistente.
Al ser de tamaño pequeño es perfecto para casa, para tenerlo al lado del teclado del ordenador y no tener que andar haciendo sitio a controladores de más tamaño. Cabe en un cajón de escritorio si molesta encima de la mesa.
La pantalla que lleva, que no tiene la versión anterior, es algo que valoro muy positivamente, sobre todo para los que somos novatos. Al empezar en esto de la producción a veces uno no sabe por qué "no se oye nada". La pantalla ayuda a saber el dispositivo está encendido y enviando la señal, así como con qué "fuerza" se están apretando las teclas y los pads, además del valor que estén enviando los knobs y alguna que otra información. Parece una tontería, pero al empezar, todo ayuda.
Por criticarle un par de cosas: las teclas son algo pequeñas comparadas con las de un piano, siendo, eso sí más grandes que las de teclados de juguete para niños. Para entrar unos acordes o unas melodías al DAW cumple correctamente; para usarlo como un piano y tocar canciones ya hay otros productos: es un controlador midi, no un teclado digital. De tener teclas más grandes también ocuparía más espacio, así que una cosa compensa la otra.
La otra cosa es que preferiría que el botón "full level" también se aplicase a las teclas, no solo a los pads.
Respecto al MPC Beats, el controlador se integra perfectamente y el conjunto es lo que lo convierte en una buena opción para principiantes. Al ser una solución cerrada es muy cómodo de usar para iniciarse en la producción, y hay multitud de videos por internet para aprender desde cómo hacer beats hasta cómo samplear.
Lo dicho: si vas a empezar a producir, es una opción a tener en cuenta.