¿Te imaginas dejarte en el tren un violín de casi 300.000 euros?
No, no me lo imagino, de hecho me parece una pesadilla. Perder un instrumento valorado en 290.000 euros te convierte en uno de los tíos más despistados del mundo. Stephen Morris, es el desafortunado protagonista de esta historia. La típica tarde tonta en la que vas en metro en hora punta, estás distraído con el móvil, bajas del tren y cuando te das cuenta el tren ha arrancado con tu mochila. Esta vez el metro de Londres arrancó con un violín con 310 años de antigüedad.
Un instrumento que enamora a los mejores músicos del mundo
Stephen Morris es un violinista solista de 51 años, miembro de la Royal Philharmonic Orchestra de Londres. Ha trabajado con un montón de artistas de primera división como Stevie Wonder, U2, Andrea Bocelli y David Bowie. También ha colaborado en la banda sonoras de películas como «El Señor de los Anillos» y «James Bond«. Siempre acompañado de su violín barroco hecho en 1709 por el reconocido David Teccler.
Una dolorosa perdida
Lógicamente a Stephen le entró un ataque de pánico cuando se dio cuenta de lo que acababa de ocurrir. Para agraviar todavía más el asunto, el violín iba acompañado de dos arcos históricos, uno de ellos pertenecía al violinista americano Micahel Rubin. Morris declaró a la BBC que se sentía como si le «hubiesen amputado un brazo». Ese violín no solo era su herramienta de trabajo, sino que también es una pieza de museo, parte de la historia de la música. El violinista no perdió en denunciar la perdida ante las autoridades londinenses.
A toda pastilla a por el violín
Al parecer un hombre de entre 25 y 30 años fue visto con el violín a través de las cámaras de seguridad. El equipo de seguridad del metro colaboró con Morris y la policía para encontrar al sospechoso. Stephen también lanzó una campaña a través de diferentes redes sociales para recuperar su violín. Al cabo de una semana recibió un mensaje privado a través de Twitter.
¿Ladrón misterioso o error embarazoso?
Al parecer alguien reconoció al hombre en las imágenes de las cámaras de seguridad. Es bastante posible que el mensaje anónimo que recibió el violinista fuese el hombre en cuestión. Su mensaje tenía un tono avergonzado y de arrepentimiento, había cometido un grave error. Al final cuadraron la entrega del violín en un parking donde se entregó en mano, todo vigilado por la policia de Londres, que no intervino ni para arrestar al ladrón ni para cerrar la investigación.
Lo importante es que Morris recuperó el violín
Nunca sabremos si fue un despiste o un robo. El propietario dice que fue un despiste suyo, aunque la policía asumió que fue robado en un principio. En cualquier caso la prensa no tardó en arrojar salseo y sensacionalismo. Lo importante es que el instrumento volvió a las manos de su dueño, incluidos los arcos y el estuche.
En un abrir y cerrar de ojos
Stephen Morris y su violín siguen viajando juntos. Es curioso como este violín lleva vagando por el mundo desde el siglo XVIII mientras que nuestro protagonista solo lo lleva tocando desde hace 15 años, lo que supone practicamente nada para la vida del violín. Ese violín ha vivido más cambios que cualquier humano vivo.
4 comentarios
Deja una respuesta
Estás viendo un contenido de marcador de posición de Facebook. Para acceder al contenido real, haz clic en el siguiente botón. Ten en cuenta que al hacerlo compartirás datos con terceros proveedores.
Más informaciónEstás viendo un contenido de marcador de posición de Instagram. Para acceder al contenido real, haz clic en el siguiente botón. Ten en cuenta que al hacerlo compartirás datos con terceros proveedores.
Más informaciónEstás viendo un contenido de marcador de posición de X. Para acceder al contenido real, haz clic en el siguiente botón. Ten en cuenta que al hacerlo compartirás datos con terceros proveedores.
Más información
Miren Ariño. dice:
Me alegro hubiese sido una pérdida irremediable. No creo que lo vuelva a despistar. En hora buena!!
juanma dice:
Quién sabe, solo el humano tropieza dos veces con la misma piedra… ?
Begoña dice:
Mis mas sinceras felicitaciones por recupera ya no sólo una herramienta de trabajo si no un intrumento tam magnífico y de incalculable valor pues no li tiene aunque se li hayan puesto
Francisca Maldonado dice:
Eso es suerte, lo demás tontería,yo tengo dos violines, pero ni de ese tiempo, los tengo para regalar a mis dos nietas, que me gustaría que lo utilicen, para aprender a tocarlo, me encanta la música que sale del violín ?