10 consejos para componer una canción

Para algunos componer canciones es algo visceral y pasionario, necesario para apagar llamas, para otros simplemente es otra tarea más. Pero por supuesto, hay muchas formas de abordar el tema de la composición de canciones. Me gustaría compartir con vosotros algunas de las ideas que siempre tengo en cuenta a la hora de componer.

1. Déjate inspirar

A menudo el ambiente adecuado puede ayudar a que surjan ideas. Para algunos lo ideal es componer a la luz de las velas en una pequeña habitación, para otros el calor de un día soleado. Descubre qué es lo que te inspira a ti. Puede surgir de cualquier lugar: un descanso para tomar un café, mientras vemos una película, en una charla con un desconocido…

2. ¡No te distraigas!

Aunque hoy en día es complicado prestar atención durante mucho rato, en parte gracias a herramientas como Facebook, Twitter o Instagram, tienes que priorizar así que pon tu smartphone en modo “Avión” y déjate llevar por la inspiración.

3. No te compliques

A veces con un ritmo sencillo repicando los dedos sobre la mesa es más que suficiente como base para desarrollar una idea. ¿Así que por qué no grabarlo? Hay canciones que están hechas a partir del sonido de una impresora, por ejemplo. Siempre intento fijar unos límites tocando la guitarra de la manera más sencilla posible, aunque sea una guitarra barata y el sonido no sea el mejor.

4. La primera idea suele ser la mejor…

Hay que tener en cuenta TODAS las ideas, pero particularmente la primera, grabada con un smartphone o algo similar porqué suele ser la toma más convincente después de una jornada componiendo. Está claro que lo ideal es grabar con la mejor calidad posible, pero una buena idea no necesita un ambiente adecuado para grabaciones.

5. ¡Experimenta!

Hay infinidad de métodos para crear nuevos sonidos y loops, desde un acorde progresivo, un loop existente o una toma de voz usando plugins o simplemente colocándolos en un DAW. Y con la tecnología MIDI que hay hoy en día es muy fácil cambiar el sonido de los instrumentos, incluso en medio de una canción. Otro aspecto a tener en cuenta es el tempo. ¿Cómo suena este tema mucho más rápido o más lento? También prueba de tocar el tema en diferentes tonos, ya verás la cantidad de diferentes emociones transmite. A veces un error de software o un micrófono roto que se cae en el momento adecuado son elementos que aportan una visión general totalmente nueva.

6. Prueba algo diferente

Cuando me atasco en el proceso de composición suelo coger algún instrumento que no utilice habitualmente como una mandolina, un banjo o una armónica. Esto te simplificará el trabajo a fijarte solo en los elementos esenciales de la canción como las líneas melódicas o la progresión de acordes. Lo cierto es que cuando tocamos nuestro instrumento favorito nos solemos saltar esta parte. Siempre viene bien cambiar de hábitos y romper con las costumbres.

7. Ensayar es una pérdida de tiempo 😉

MEEEC ¡Incorrecto! Ensayar no le hace daño a nadie y nunca está de más poder aprovechar todo lo aprendido para sacar cosas nuevas. Ensayar nos ayuda a perfeccionar y es algo que se puede aplicar perfectamente a la composición de canciones.

8. ¡Estructura!

Nadie te ha pedido que reinventes la rueda pero sí que intentes desarrollar tu propio método de composición. Suele pasar que se invierte más tiempo en encontrar el sonido deseado que en la composición en sí. Si trabajamos así perderemos mucho tiempo al final y no es algo muy útil que digamos. Si una canción tiene esencia y estructura, no necesita purpurina y maquillaje.

9. Dale un respiro.

Oxigena tus ideas, trabajo en algo nuevo. No siempre todo lo que hagas será la obra de un genio. A menudo pasa que se componen docenas y docenas de canciones para que acaben dentro del disco tan solo 10 temas. Suele pasar que a veces una composición está hecha de varias partes diferentes, arregladas para que formen algo único.

10.¡La música es diversión!

Si al final del día la jornada no ha sido lo productiva que esperabas recuerda que la inspiración va y viene, como cualquier proceso creativo. Para mi, la creatividad es un músculo que hay que entrenar. Analizar canciones puede ser muy útil, y no me refiero necesariamente a analizar la armonía o las estructuras rítmicas, sino más bien al efecto emocional de estas. ¿Por qué hay unos coros en concreto que me tocan la fibra sensible? ¿Es lo que dicen o cómo lo dicen? ¿Se trata de un sonido concreto que apoya la composición completa?

Espero que estos consejos os sean útiles la próxima vez que os pongáis a componer para vuestro futuro proyecto. Quién sabe, quizás alguna de estas ayudas te impulse directo a las listas de éxitos. En cualquier caso, disfruta, disfruta y disfruta tocando.

Juanma vive en Barcelona y se pasa el día inmerso en el mundo de la música entre ensayos, grabaciones y conciertos.

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